martes, 9 de febrero de 2010

Vitroparanoia. Hopes and Fears de cuando estás de rodriguez.

Me levanto a las 6:15h tras apagar el despertador. Puede que lleve una hora sonando. Soy como un zombie, lo hago todo de forma ralentizada y mecánica. Tras lavarme y despejarme decido que tengo tiempo de hacerme un café como Dios manda, de ese de cafetera autentica y no el Nespresso que tanto le gusta a George Clooney (y que no despeja nada).

Tras echar agua y una cantidad considerable de café en el filtro (si es que se llama así donde se pone el café), enciendo la vitro. Me quedo observando perplejo durante unos minutos sin que nada ocurra, y decido adelantar cogiendo el abrigo y preparando las cosas que me llevo. Tras esto miro otra vez la cafetera: no suena nada. Miro el reloj nervioso y me doy cuenta que lo que antes era pronto ahora es tarde, y que voy a tener el tiempo muy justo. Cuando al fin sale ese preciado líquido oscuro cargado de cafeína (y bastante oscuro, por cierto), retiro la cafetera y me echo el café en la taza con leche fría. Miro el reloj: HURRY UP!

Pongo la alarma y cierro la puerta. camino deprisa, aunque se que lo más probable es que el autobús que me lleva al Metro haya pasado. Maldigo en voz alta, y miro alrededor por si acaso alguien lo ha oído, aunque no hay nadie a la vista. Voy directo a la parada por donde pasa otro autobús, que aunque no me deja en el Metro, si me acorta bastante camino a si voy andando.

Al fin llego al Metro. Pico el billete. Viene uno! Corre!
Logro sentarme, cosa que no suele ser habitual. Miro el reloj: creo que llego bien al fin y al cabo. Decido que voy a leer, y cuando abro el libro me asalta una duda existencial: "¿¿¿he apagado la vitro???" Me asusto y reviso mentalmente todo lo que he hecho antes de salir de casa. Nada, no lo recuerdo! Vuelvo a revisar, pero no hay nada, tan solo un vacío en la memoria. Las posibilidades son de un 50%. "Mierda, que hago?!" Pienso en bajarme y darme la vuelta, pero al mirar el reloj me doy cuenta de que sería llegar muy tarde a currar. Cierro el libro, al cual no le había prestado atención, y empiezo a ver imágenes de mi casa ardiendo, de una chispa que salta, de una explosión, de los bomberos y la policía... Me acojono más, pero pienso en que puedo avisar a la vecina para que lo revise. si eso es lo que voy a hacer.

Del Metro a la oficina no puedo parar de pensar en ello, mientras en mi Mp3 suenan The Horrors.

Una vez en la oficina me doy cuenta de que no puedo llamar tan pronto a mis vecinos, son las 8:00 de la mañana! "Bueno, no pasa nada, esperaré a las 10:00". Noto que el corazón me late con rapidez, el café ha hecho más que activarme.

Tras dos horas interminables, llamo a mi vecina, con miedo de despertarla y con vergüenza de contarle mi duda existencial. "Hola, me puedes hacer un favor,... Mira, que no se si me he dejado encendida la vitro y no paro de pensarlo..." Me dice que no pasa nada, que suele pasar, pero creo que piensa que soy un pardillo o algo peor. Tiene razón. La llamo al rato y me dice que estaba apagada. Respiro hondo, como si me hubiera quitado una losa del pecho. Al instante me pongo rojo y suelto una carcajada.

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