miércoles, 20 de octubre de 2010

The Len Price 3 + The Grannies + Pravda (16/10/2010)

El pasado sábado había cita con el garage mod del grupo The Len Price 3 en el Wurlitzer Ballroom.

Llego con la hora demasiado justa, esta vez por motivos de reunión familiar, y al comprar la entrada me preguntan “vas a entrar ya?”, “¿es que aún no ha empezado?” me extraño, “si, el primer grupo lleva la mitad del repertorio”.

La verdad que poco puedo decir de ellos, de Pravda, pues tan solo escuché las últimas 2 o 3 canciones (la última duró bastante), pero la impresión que me crearon fue buena.

Tras ellos se subieron al escenario The Grannies, un grupo italiano con bastantes influencias de The Libertines. Chulescos y con mucha pose, la verdad que no estuvieron nada mal e hicieron bailar al público, que por momentos se llenaba de mods de vieja escuela.

The Len Price 3 salieron espídicos, demostrando trallazo tras trallazo que la música de los 60 puede hacer muy buenas migas con el punk más enérgico. Sus influencias son más que obvias (The Who, The Kinks, The Small Faces, The Jam,...), pero aunque no hagan nada nuevo, no pierden ni una pizca de frescura en sus canciones, las cuales comienzas a cantar tras la primera escucha.

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P.D. Gracias a C. Helter por la recomendación y a C. Infinito por descubrírselos a ella.

viernes, 8 de octubre de 2010

El otro día por la tarde

Camino solo, hacia la parada del autobús que me llevará a casa. Podría coger el Metro, pero decido que, con el tiempo que hace, me apetece disfrutar un poco de la ciudad.

Me doy cuenta de lo bonito que es Madrid, esa ciudad por la que tantas veces paso, pero a la que suelo prestar menos atención de la que merece.

Los turistas abarrotan las calles principales, y envidio esa ilusión y ganas de descubrir reflejada en sus caras de entusiasmo. Si, hay algo mágico cuando descubres una ciudad, algo que se pierde cuando la conoces de toda la vida, pero que de forma repentina puede volver, dibujándote una sonrisa.

Al recorrer un camino que llevas haciendo tanto tiempo, cierta nostalgia te recorre el cuerpo con un escalofrío. Los momentos allí vividos se amontonan y pasan deprisa ante tus ojos, a la vez que piensas la suerte que tienes de estar allí, y de compartir ese sentimiento mágico con tanta gente al mismo tiempo. Muchos de ellos están allí por primera vez y quizá no vuelvan nunca, pero lo más seguro es que con el paso de los años sigan recordando ese preciso instante.

Sigo mi camino, el cual antes solía hacer acompañado. Cierto sentimiento de soledad me invade al pensarlo, sensación que me acompaña hasta la parada del autobús.

La de tiempo que habré pasado en un autobús... La de decisiones que he tomado pensándolas en ese medio de transporte, la de ideas que me han surgido, la de música que he escuchado...

Enciendo el mp3 y todo cobra sentido, al menos durante un rato.

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