El concierto, dentro de la iniciativa Ellas Crean, es en la sala Clamores, local mas habituado al jazz. Y digo esto porque al llegar (la primera vez que un servidor entra) me llama la atención que la gente está sentada en mesas, cosa poco común dentro del rock.
Tras una introducción instrumental a cargo de la banda, lluvia sale al escenario, y, botella de vino en mano, pregunta “¿¿Pero que hacéis sentados??”. Menos mal, ya pensaba que yo era el único extrañado.
Mis expectativas son superadas, el grupo suena compacto y contundente, y Lluvia tiene una actitud 100% rockera, como si llevara toda la vida dando conciertos. Letras en inglés, voz impecable y músicos más que buenos. Todas y cada una de las canciones me gustaron, muy enérgicas, pero a la vez con cierto tinte oscuro y alternativo, según la cantante “todas las letras van sobre asesinatos, sexo y vino”. Por su sonido podrían haber encajado perfectamente en la escena alternativa de los '90, pero están aquí y ahora, y esperemos que por mucho tiempo.
El público reclamó un bis y consiguió la repetición de uno de los temas, ya que como bien dijo Lluvia “somos nuevos, no tenemos más canciones”.
Al finalizar pienso en alto “¡que bombazo de grupo!”. Ya tienen un fan más.
Creo que No Band For Lluvia va a sorprender a muchos.
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